Equinor decidió abandonar la construcción de los parques eólicos Cañadón León I y II, de 120 MW MW, que estaba llevando adelante en sociedad con YPF Luz en la provincia de Santa Cruz y que requerían de un desembolso de 190 millones de dólares (incluyendo IVA e impuestos).
La salida de la petrolera noruega es la segunda en lo que va del año en el sector de energías renovables luego de que la canadiense Isla Power devolviera los proyectos solares Tocota Solar I (50 MW), Tocota Solar II (6 MW) y Tocota Solar II A (4 MW), en San Juan, como adelantó Desarrollo Energético.
Equinor tomó la decisión como parte de su plan de reducción de inversión costos y exploración de 3.000 millones de dólares en todo el mundo “para enfrentar los desequilibrios actuales en los mercados y la mayor volatilidad e incertidumbre”.
De esta forma, su unidad de energías renovables Wind Power AS desistió de continuar con el acuerdo que había firmado con YPF Luz el 5 de agosto de 2019, por medio del cual adquiría el 50% Luz del León SA, la empresa controlante de los proyectos eólicos Cañadón León I y II.
La firma noruega se había comprometido a pagar 30 millones de dólares (20 millones de capital y 10 millones de prima) por la participación en ambos parques eólicos que serían utilizados para su construcción, como fue informado por Desarrollo Energético
Sin embargo, una fuente cercana a Equinor destaca que la compañía nunca llegó a desembolsar el dinero ya que tenía tiempo para hacerlo hasta el 31 de mayo cuando vencía la fecha límite para rubricar el contrato de compra de las acciones. Como contaba con una cláusula que establecía que si no se daban ciertas condiciones podía desistir de la operación, optó por ejecutarla antes de la fecha límite, explica.
La venta de la participación en Cañadón León I y II había sido aprobado por la socia de YPF Luz, GE Energy Financial Services (GEEFS) y debía haberse cerrado el 31 de diciembre, pero, luego, se corrió hasta finales de este mes.
Las obras
La construcción de los parques eólicos continuará sin cambios a pesar de la salida de Equinor, ya que la compañía noruega era tan solo una socia comercial y su desarrollo y la operación estaba y seguirá estando en manos de YPF Luz, explica una fuente cercana a la unidad energética de la petrolera controlada por el Estado.
Los trabajos en la provincia de Santa Cruz siguen avanzando y ya se han transportado al sitio 17 aerogeneradores (de un total de 29) de 4,20 MW cada uno, que habían llegado a Puerto Deseado el 14 de enero, de los cuales se han montado 8 en algunas de las 26 bases que ya están terminadas. Por eso, la empresa espera realizar el comisionado de las turbinas General Electric (GE) a fines de este año, como adelantó Desarrollo Energético, ya que espera inaugurarlos en el primer trimestre de 2021.
Su desarrollo requerirá de una inversión de 190 millones de dólares que la compañía está financiando con un crédito 100 millones de dólares con una tasa del 6,50% con vencimiento a 15 años del BNP Paribas Fortis y otro de 50 millones con una tasa del 3,40% al mismo plazo de la US International Development Finance Corporation (DFC) la ex Overseas Private Investment Corporation (OPIC).
La presencia del banco estadounidense respaldando la construcción de estos parques eólicos se deba a que YPF Luz tiene como accionista a GEEFS (12,49%) y las turbinas que está utilizando son provista por GE, como informó Desarrollo Energético.
El préstamo de BNP Paribas Fortis está completamente garantizado por Euler Hermes Group. La decisión de la ECA alemana participar del proyecto se debe a que los aerogeneradores que están siendo instalados en Cañadón León I y II cuenta con partes producidas en Alemania.
Por el momento, las entidades han desembolsado 80 millones de dólares que está siendo utilizado en el desarrollo del proyecto y se comprometieron a realizar los siguientes envíos en los próximos meses, explica una segunda fuente cercana a la compañía.
En tanto, la compañía ya lleva inyectado, además, los 40 millones de dólares restantes que necesita para completar los 190 millones de dólares que requiere la construcción de ambos parques eólicos.
Estos fondos provienen, en parte, del bono de 400 millones de dólares con tasa del 10,25% y vencimiento en 2026 que YPF Luz emitió el 19 de julio para respaldar el desarrollo de varios de sus proyectos. La operación fue manejada por Citigroup, HSBC e Itaú BBA, mientras que Banco Itaú Argentina e Itaú Valores actuaron como co-colocadores locales.
La compañía había sido adjudicada con un PPA de 20,50 dólares por MWh para construir Cañadón León I, de 99MW, en la licitación internacional RenovAr 2, en noviembre de 2017. En tanto, los 21 MW de Cañadón León II serán vendidos a YPF para su propio consumo.
Por Hernán Dobry