Mientras la mayoría de los políticos estaba centrada en la recta final de la campaña electoral de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) recrudeció la guerra interna dentro del sector energético del gobierno.
El centro del conflicto es el manejo personalista y poco transparente que le ha dado el presidente de la estatal Energía Argentina Sociedad Anónima (ENARSA), Agustín Gerez, al proceso de construcción del gasoducto presidente Néstor Kirchner (GPNK) y sus obras complementarias, durante el cual retaceó o, directamente, le negó todo tipo de documentación que le solicitaba el Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS).
Una y otra vez el organismo le exigió que le enviara información sobre el avance de los trabajos o el estado de los caños del ducto Mercedes Cardales, pero jamás obtuvo respuesta ni un solo papel con membrete oficial. Incluso, dejó constancia de que la empresa desconocía las regulaciones que debía aplicar para inspeccionar el proceso de soldadura de los caños del ducto que ya conecta la localidad neuquina de Tratayén con la bonaerense de Salliqueló.
Tras mucho insistir, el ENARGAS logró el 3 de abril que ENARSA se comprometiera a realizar una auditoria de estos procedimientos, que debería costear con sus propios fondos. Para esto, antes debía enviar un listado de firmas que llevarían a cabo estos trabajos, como adelantó en exclusiva Desarrollo Energético.
Esto jamás ocurrió. Por eso, el interventor del organismo, Esteban Pitrau, elevó la apuesta, cansado del destrato y las dilaciones del funcionario kirchnerista y lo intimó bajo apercibimiento a que si en dos días hábiles no daba respuesta a sus requerimientos le iniciaría “el proceso sancionatorio correspondiente” a través de la nota NO-2023-85945270-APN-DIRECTORIO#ENARGAS del 25 de julio.
“Asimismo, se advierte que, atento al tiempo transcurrido, la respuesta a ser emitida por parte de ENARSA se DEBERÁ AJUSTAR ESTRICTAMENTE a las pautas fijadas respecto a las aptitudes de los profesionales intervinientes en todos los aspectos involucrados para esta Auditoria, tal fueron expresados explícitamente por esta Autoridad Regulatoria en sus notas NO-2023-36627602-APN-DIRECTORIO#ENARGAS, NO-2023-45852917-APN-DIRECTORIO#ENARGAS y NO-2023-48177269-APN-DIRECTORIO#ENARGAS, dado que dichas especificaciones de antecedentes profesionales son indispensables para llevar adelante las AUDITORÍAS TÉCNICO REGULATORIAS ordenada por este Organismo el 3 de Abril del corriente año”, sostuvo en la misiva.
Una vez más, ni Gerez ni nadie de ENARSA le respondió, a pesar de que ya pasaron doce días hábiles desde que le remitió el telegrama. Ahora, el ente está analizando qué medidas tomará contra el funcionario por el constante incumplimiento de las normativas públicas.
El hartazgo de Pitrau tiene sus fundamentos. El 22 de junio ya le había dado cinco días hábiles mediante la nota NO-2023-71532744-APNDIRECTORIO# ENARGAS para que le informara sobre el estado del proceso de selección de la empresa que realizaría la auditoria para que el organismo de control pudiera definir los pasos a seguir. Una vez más, pasaron las jornadas y nadie contestó.
La empresa estatal de energía debía “hacer especial hincapié en los requerimientos a exigir al Auditor a contratar, por cuanto éste deberá contar con todos los antecedentes necesarios y con profesionales de acabado conocimiento en la materia objeto de la presente Auditoría”.
Para esto, tenía que remitirle al ENARGAS “los debidos fundamentos”, incluyendo los currículums de quienes realizaría directamente “los estudios e informes a producir, debiéndose privilegiar aquella que tenga profesionales, especialistas en soldadura aplicación de las normas internacionales, normas NAG, y direcciones de obras similares”.
Además, el ente había hecho hincapié en que de ninguna forma podían participar profesionales que hubieran actuado “en las empresas contratistas adjudicatarias de las obras en cuestión, como así también cualquier profesional que se haya desempeñado en la inspección contratada o interviniente en la actualidad por ENARSA”.
Con toda información sobre la mesa, el ENARGAS decidiría si daba conformidad de sus aptitudes profesionales o calificación para su contratación. Sin embargo, nada de eso ocurrió porque Gerez incumplió una vez más lo que le había prometido a Pitrau a través de la nota NO-2023-00004668-IEASA-DIR#IEASA del 26 de abril: enviar a la brevedad el o los candidatos para realizar el trabajo. Desde ese entonces, nunca más volvió a contestar.
En medio del proceso electoral, todo esto pasó desapercibido. Ahora, que quedan poco más de dos meses para los comicios presidenciales y algunos líderes han quedado debilitados tras los resultados de ayer, por lo que esta batalla podría aumentar su intensidad y tornarse aún más encarnizada.
Por Hernán Dobry