El apetito por las energías renovables en la Argentina ha mostrado una nueva faceta en la ronda de asignación de prioridad de despacho que está realizando la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico Sociedad Anónima (Cammesa): la aparición de nuevos jugadores y la vuelta de viejos proyectos que ya habían obtenidos permisos para unirse al Sistema Argentino de Interconexión (SADI).
Generadoras y desarrolladoras, que nunca habían participado de este mercado, han debutado tentadas por la posibilidad de reinvertir los pesos que tienen en su cartera para, luego, conseguir contratos de venta de energía con privados atados al dólar, una especie de seguro de cambio, en un país donde la divisa local siempre pierde terreno frente a la estadounidense.
Otra de las particularidades que mostró la ronda que está llevando a cabo Cammesa es la reaparición de viejos proyectos que ya habían sido asignados con prioridad de despacho, pero fueron devueltos por sus dueños anteriores y vueltos a presentar por nuevos jugadores o, incluso, por los mismos, en una especie de revancha contra el sistema.
Nuevas y viejas propuestas, jugadores debutantes y veteranos en el mercado se disputan con uñas y dientes los escasos 244 MW que tiene disponible el SADI para la región de Centro, Noroeste y Cuyo. La mayoría de ellos quedará en el camino luego de desempate que realizará la firma estatal de energía el 27 de julio, ya que se presentaron 29 parques por un total de 1.477,70 MW y porque deberán escalar en los montos de garantías que proponen para desplazar a sus competidores.
Dado que las zonas que aún contaban con espacio de conexión cuentan con una de las mejores radiaciones solares del país, la mayoría de las plantas fueron fotovoltaicas, ya que contabilizaron un total de 1.021,30 MW en diez proyectos ubicados en las provincias de La Rioja, Mendoza, Salta, Catamarca y San Luis.
En esta oportunidad, San Juan, que venía siendo uno de los destinos más buscados por las empresas, tuvo que dar un paso al costado ya que la estación transformadora de Nueva San Juan agotó totalmente su capacidad, pese a que la subregión Exportación San Juan le quedan disponibles 275 MW.
Por el lado eólico, las empresas presentaron cuatro propuestas, que sumaron un total de 456,40 MW, en San Luis y Córdoba. Una vez más, la Patagonia y Buenos Aires fueron dejadas de lado por falta de espacio en los nodos de conexión, pese a que en las subzonas había lugar para sumar más parques.
Hasta el momento, la estrategia de la Secretaría de Energía de la Nación para intentar liberar espacio en el SADI a través de la resolución 1260/2021 ha fracasado ya que aún no ha logrado que se dieran de baja ninguno de los proyectos que cuentan con contratos adjudicados en las diferentes rondas de las licitaciones RenovAr.
Varias compañías solicitaron la rescisión de 27 PPAs a tiempo por un total de 747,57 MW, pero la burocracia interna del gobierno y las presentaciones administrativas y judiciales que realizaron otras empresas han paralizado el proceso.
De esta forma, las energías renovables siguen avanzando en cámara lenta y la administración de Alberto Fernández continúa incumpliendo año tras años las metas fijadas en la ley 27.191 de porcentaje de generación de origen verde, que estipula que deberían representar el 16% en 2021 y un 18% en 2023, cuando hoy en día sólo alcanzan el 13%.
Nuevos jugadores y viejos proyectos
La actual ronda de asignación de prioridad de despacho que está realizando Cammesa ha significado el debut de una de las estrellas del mercado energético local de los últimos tiempos: MSU Energy.
La unidad de generación del Grupo MSU es una especialista en térmica, ya que cuenta con tres centrales de ciclo combinado (General Rojo, Barker y Villa María) con una capacidad instalada de 750 MW, a las que se suman todas las plantas que acaba de adquirir de la ex Stoneway, que le suman otros 737 MW adicionales.
Sin embargo, hasta ahora, nunca se había interesado en el mercado renovable, al punto de que jamás participó en las licitaciones RenovAr ni en las rondas de asignación de prioridad de despacho anteriores lanzadas por Cammesa.
En los últimos meses, su estrategia cambió, para lo que adquirió diversos proyectos que habían desarrollado otras compañías, muchos de los cuáles habían ganado en las subastas realizadas por la mayorista de energía estatal o formado parte de concursos de precios en el pasado.
Como informó Desarrollo Energético, MSU Energy se presentó en la licitación privada que está realizando la minera Depromisa para suministrarle electricidad de fuentes renovables a su proyecto de cobre y oro Josemaría, en la provincia de San Juan.
En esta nueva ronda de Cammesa, la compañía redobló la apuesta ya que propuso construir cuatro plantas fotovoltaicas por un total 180 MW: La Rioja Norte (15 MW) y Patquía (20 MW) en La Rioja y Los Zorros (45 MW) y Alpataco (100 MW) en Catamarca.
Los cuatro proyectos habían sido desarrollados originalmente por Compañía Latinoamericana de Energía (CLE) y son viejos conocidos en el mercado. Los tres primeros ya habían obtenido prioridad de despacho en 2018, mientras que el restante había sido presentado en la RenovAr 2, pero fue rechazado.
Otro de los debutantes es la empresa local Intermepro, que desarrolla y construye proyectos para terceros en América latina. Su desembarco fue a toda máquina ya que propuso construir dos plantas solares, Intermepro Gen I y II, de 100 MW cada una en La Rioja.
En esa misma provincia, la estatal Parque Eólico Arauco (PEA) no sólo competirá por primera vez en las licitaciones de Cammesa sino que también será su lanzamiento en el mercado fotovoltaico.
La empresa controlada por el gobierno riojano y Energía Argentina Sociedad Anómima (ENARSA) presentó el proyecto Arauco Solar II-III-IV, de 150 MW, a sabiendas de que el SADI carece de ese espacio en el nodo de interconexión.
Incluso, esa cuota la tiene ocupada sus parques eólicos Arauco II (etapas 3,4, 5 y 6), de 195 MW, que fueron adjudicados con un PPA en la licitación RenovAr 2, por lo que primero deberá esperar a que Cammesa le acepte la baja de los contratos.
PEA planea desarrollar este proyecto en sociedad con la constructora PowerChina, sin embargo, precisará que la provincia ponga el 30% del financiamiento y el gobierno nacional firme la garantía soberana para poder obtener el financiamiento chino que necesitará para llevar a cabo las obras.
Otra empresa debutante en las licitaciones de Cammesa es la también estatal Empresa Mendocina de Energía Sociedad Anómica (EMESA), quien presentó las plantas fotovoltaicas Malargüe, de 25 MW, y Capiz I, de 20 MW.
Si bien se trata de la primera vez que la compañía energética provincial se presenta en estos concursos, ya había ganado siete PPAs en distintas licitaciones RenovAr: los solares Lavalle (17,60 MW), Luján de Cuyo (22 MW), Anchoris (21,30 MW), General Alvear (17,60 MW) y La Paz (14,08 MW), y el eólico El Sosneado (50 MW).
Sin embargo, todos resultaron un fracaso, salvo Pasip (1 MW), que ya se encuentra en operación. El Sosneado se encuentra en proceso de devolución del contrato, algo similar a lo que ocurrió con los demás solares, que fueron vendidos a CEOSA y al no poder construirlos está buscando la forma de darlos de baja.
Entre las propuestas que recibió Cammesa también se encuentran las plantas fotovoltaicas Energías Renovables de la Esperanza, de 7,50 MW, y Calicanto, de 10 MW, y la eólica Boreas del Norte, de 100 MW, las tres en San Luis, que fueron presentados con nombres de fantasía, cuyos dueños reales ha sido imposible saber quiénes son.
Por el lado de los proyectos reincidentes, se encuentra el solar El Carrizal, de 39,60 MW, en Mendoza de la firma Surland Cuyana. La empresa ya había obtenido prioridad de despacho en la ronda realizada en julio de 2019, pero para levantar sólo 15 MW, ya que no quedaba más espacio en el nodo.
Sin embargo, la compañía no pagó la garantía en medio de la crisis financiera desatada tras la derrota de Cambiemos en las PASO, por lo que perdió el contrato. Esa era la segunda vez que lo presentaba ya que en marzo de 2018 había sido rechazado, a pesar de que había propuesto construir 20 MW.
Otro de los proyectos que volvió al ruedo pese a haber obtenido en el pasado permiso de conexión al SADI fue el fotovoltaico Green Valley Solar, de 50 MW, en Catamarca, de la empresa homónima. La firma había resultado victoriosa con una versión más pequeña, de 34,38 MW, en agosto de 2018, pero tampoco abonó la suma que le exigía Cammesa por lo que fue dado de baja.
Finalmente, otro que retornó a las ruedas de asignación de prioridad de despacho por una segunda oportunidad, pero en una versión ampliada, fue San Carlos, de 12,50 MW, en la provincia de Salta.
Esta planta solar había resultado victoriosa de la mano de su dueña Sybac Solar IV en marzo de 2018, sin embargo, la compañía tuvo que devolver el contrato el año pasado al fracasar en su intento por construirlo.
La vuelta de San Carlos es doble ya que, al mismo, tiempo se trata del retorno de la empresa Central Puerto a las licitaciones de Cammesa, al mercado de las energías renovables y, especialmente, a los solares, de los que había alejado en 2021 tras devolver el permiso de interconexión que tenía para El Puesto, de 12 MW, en Catamarca.
Finalmente, la lista de reincidentes la cierra la desarrolladora RPG, ya que le propuso a la mayorista energética construir la planta fotovoltaica Santa Clara II, de 100 MW, en la provincia de San Luis.
Si bien le ha dado una cuota de maquillaje al proyecto, se trata de otra versión de Santa Clara III, de igual cantidad de potencia instalada, que había obtenido prioridad de despacho en noviembre de 2021 y fue dado de baja por falta de pago de la garantía de reserva.
Los participantes de siempre
Además de las debutantes y reincidentes, también presentaron propuestas otras compañías que vienen haciéndolo asiduamente en las ruedas de asignación de prioridad de despacho.
A la cabeza, se situó Petroquímica Comodoro Rivadavia (PCR), quien propuso construir el parque eólico San Luis Norte, de 201,60 MW, en la provincia homónima, como parte de su proyecto de desarrollo que tiene para esta región.
Como adelantó Desarrollo Energético, la compañía busca levantar un parque híbrido en la zona dado que ambas tecnologías se complementan ya que el factor de generación a la hora de la siesta baja mucho porque no hay viento y se lo puede reemplazar con lo producido con una planta solar.
En el ranking, le sigue 360Energy ya que presentó seis proyectos fotovoltaicos por un total de 190 MW: La Rioja (40 MW), La Rioja II (20 MW), La Rioja III (22 MW), y Villa Unión (60 MW), en la provincia de La Rioja, y Saujil II (20 MW) y Tinogasta (28 MW), en la de Catamarca.
Tercera en la lista se ubica la desarrolladora uruguaya Ventus Energías Renovables, que propuso construir dos plantas solares en Córdoba por un total de 154,80 MW: General Lavalle I y II, de 64,50 MW y 90,30 MW, respectivamente.
Luego, le siguen la alemana Abo Wind, que presentó el proyecto fotovoltaico Los Nogales, de 9,50 MW, en San Luis y Tassaroli, que hizo lo propio en Helios Santa Rosa II, de 5,20 MW, en Mendoza. Este último es la ampliación de Helios Santa Rosa, que la empresa ya tiene en operaciones.
A su vez, Generadora Solar Santa Rosa propuso construir Solar de los Andes II, de 2 MW, en Mendoza, que será el complemento del Solar de los Andes, de 5 MW, que también levantó Tassaroli y ya está generando.
Finalmente, la lista la cierra la compañía Xeitú Energía, quien presentó el proyecto fotovoltaico Luján de Cuyo III, de 20 MW, también en la provincia de Mendoza.
Por Hernán Dobry